Es injusta la zarandeada que los políticos priístas le están dando al gobierno federal por las recientes alzas en algunos precios públicos. Las alzas no sólo están justificadas sino que son urgentes. Lo que se le debería criticar al gobierno de Calderón es que no reconozca que con estas alzas "graduales" está pagando la irresponsabilidad y el populismo de haber congelado dichos precios. La demagogia siempre pasa la factura. Y por partida doble: No sólo hay que pagar los errores ajustando los precios y recibiendo reproches, sino que además hay que aguantar a los demagogos de la oposición que exigen, como a ellos no les cuesta nada, que sigamos viviendo en la economía ficción. !Ay, los males del populismo!