El populismo es populismo lo haga Hugo Chávez o lo haga George W. Bush, lo haga López o lo haga Calderón. Y el pacto tortillero es populista porque NO garantiza mejores precios que los que habría sin la intervención gubernamental en el asunto, al contrario: incentiva a los nixtamaleros, las pequeñas tortillerías, a obtener del gobierno un precio tope más alto que el del mercado... Precio más alto que sólo pagarán los más pobres que viven en lugares en los que no hay supermercados que pueden vender el kilo de tortilla con precios mucho más bajos porque son más eficientes (precios de 4 a 6 pesos el kilo contra 8.50 que es el máximo fijado en el pacto). Dos moralejas: Quienes más se perjudican cuando no hay competencia, condiciones de libre mercado ¡son los pobres! y quienes más fastidian a los pobres ¡son sus defensores oficiosos!