“Los argumentos tpicos, pero equivocados, para que el gobierno gaste en educacin pblica son que: a) Los pobres no pueden pagar por su educacin, b) Lo que hoy se gasta, maana retornar al Estado a manera de impuestos que pagarn los que estudiaron, c) La educacin de un pueblo es tan importante que no se deben escatimar los gastos que genere, d) Vale la pena gastar en educacin porque se construye un mundo mejor. En realidad, ninguno de estos argumentos tiene validez.”
El siguiente texto es la transcripción de la conferencia que dictó el Dr. Santos Mercado Reyes durante el III Congreso de Investigación Económica y Políticas Públicas: “Cambio tecnológico y desarrollo regional, XV años de ciencia económica en el estado de Hidalgo", en octubre de 2010.
"In 1847, Marx and Engels proposed ten steps to convert the Western nations to Communist countries without firing a shot. Most of these ideas have been successfully implemented in our own country with little, if any, resistance! ... One of the ten steps called for "centralization of credit in the hands of the state, by means of a national bank with state capital and an exclusive monopoly" just like our own Federal Reserve! ... Another of the ten steps called for instituting "a heavy progressive or graduated income tax" just like our own federal income tax! ... Another step proposed by Marx and Engels was "abolition of all right of inheritance," which we come ever closer to as inheritance taxes increase. Taking wealth at gunpoint, if necessary that one person has created and given to another person is theft. Whether the wealth creator is alive or dead, the act and the impact are the same. Another step was "free education for all children in public schools." Although our country still has many private schools in addition to the public ones, the content of both is dictated by aggression-through-government, to teach aggression. Marx and Engels also recommended the "extension of factories and instruments of production owned by the state." In the past century, more and more services have become exclusive, subsidized government monopolies (e.g., garbage collection, water distribution, mass transit, etc.). As a result, we pay twice as much for lower quality service! Marx also called for the "centralization of the means of communications and transport in the hands of the state." Television and radio stations are licensed by the Federal Communications Commission. A station that does not pursue programming considered "in the public interest" is stopped at gunpoint, if necessary from further broadcast. ... Radio stations have an elite ownership as well. Those who benefit from aggression-through-government have little incentive to tell the public that licensing is a tool of the rich! ... Another of the ten steps calls for "confiscation of the property of all emigrants and rebels" ... our law enforcement agents can seize the wealth of anyone suspected of drug crimes without a trial! The Internal Revenue Service (IRS) has also been seizing the assets of taxpayers without a trial if the IRS thinks they might have underpaid their taxes! The wealth we have created can be taken from us at gunpoint, if necessary without a formal accusation or a chance to defend ourselves! ... In addition, Marx and Engels called for "abolition of property in land and application of all rents of land to public purposes." In other words, land would not be privately owned. No homesteading would be permitted. Our federal and local governments have title to 42% of the land mass of the United States. Most of the remaining land is under government control as well. For example, today's homeowners can pay off their mortgages, but must still pay property taxes to the local government. If they stop payments, their property is taken from them. They are, in essence, renting their home from the local government."
-- Dr. Mary J. Ruwart
INTRODUCCIÓN
La vocación de desarrollo del Estado de Hidalgo se nota en todos los rincones de esta entidad de la República Mexicana. Su deseo de acabar la pobreza se refleja en el desarrollo económico de los últimos 20 años. La entrada de empresas internacionales, el flujo de mercancías, sus exportaciones así como su mejoramiento en la infraestructura son muestras de que hay una decisión política por hacer del Estado de Hidalgo un buen ejemplo de progreso y bienestar para la región y al fin, para todo el país. Pero tiene un gran problema en su sistema educativo. Un problema de incompatibilidad, un problema de incoherencia entre lo económico y lo educativo.
EL ESFUERZO EDUCATIVO
Es indudable que en el Estado de Hidalgo se han hecho grandes esfuerzos por la educación del pueblo. Se pueden contar por miles los planteles dedicados a la educación básica (7,353 escuelas), los hay en las ciudades, en los valles y en la sierra. La educación media superior contaba hasta 2003 con 218 planteles, todos los municipios cuentan al menos con una escuela secundaria; también tienen educación normal, extraescolar y escuelas de capacitación del trabajo. Se pueden ver los esfuerzos educativos en la educación universitaria. Cuentan con la prestigiosa Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo, el Instituto Tecnológico de Pachuca, el Instituto Tecnológico Superior de Huichapan, la Universidad Politécnica de Pachuca, la Universidad Tecnológica de Tula, la Universidad Tecnológica del Valle del Mezquital, el Instituto Superior del Oriente del Estado de Hidalgo, la Universidad Politécnica de Tulancingo. Incluso, el Estado de Hidalgo tiene instituciones educativas no gubernamentales, tales como: Centro Hidalguense de Estudios Superiores, la Universidad del Futbol y Ciencias del Deporte, el Instituto Tecnológico y de estudios Superiores de Monterrey-Campus Hidalgo y la Universidad La Salle.
MUCHOS ESFUERZOS, POCOS RESULTADOS
En realidad, el gasto en educación es enorme. En este año se destinarán a la educación básica 9,039 millones de pesos. Es decir, en promedio más de mil pesos por niño de primaria al mes. No importaría tanto el gasto enorme si los resultados fueran satisfactorios, pero no lo son. ¿Qué resultados esperábamos de las escuelas?
Eficiencia terminal. De cien niños que entran a la educación básica, ¿cuántos salen con título Universitario?
Compatibilidad estudios-trabajo. De los que salen con título universitario, ¿cuántos trabajan en su campo de estudio?
Utilidad económica. ¿Qué sueldos tienen los nuevos profesionales?
Emprendimiento. ¿Cuántos de los nuevos egresados salen con la idea y decisión de fundar su propia empresa?
Nuevos empresarios. ¿Cuántos alumnos graduados tienen sus propias empresas a los tres años de haber egresado?
Empresarios exitosos. ¿Cuántos universitarios graduados están dando empleo a más de cien trabajadores?
Internacionalización. ¿Cuál es el nivel de inglés que tienen los alumnos al terminar sus estudios universitarios?
Mundialización. ¿Cuántos logran penetrar al mercado de trabajo en el extranjero y con buenos sueldos?
Investigación. ¿Cuántos graduados logran registrar patentes? ¿Cuántos se dedican a la ciencia?
Estas preguntas tienen que ver con los objetivos o la misión del sistema educativo del Estado de Hidalgo. ¿Cuáles eran los objetivos que se trazaron para la educación de los habitantes del Estado de Hidalgo?
EL MODELO EDUCATIVO DEL ESTADO DE HIDALGO
De acuerdo a los informes oficiales la mayor parte de las escuelas y universidades del Estado de Hidalgo son públicas, es decir, son propiedad del gobierno. Menos del 20% de los plantes son privados.
Las escuelas públicas nacieron de por iniciativa de los gobernantes quienes expropiaron los terrenos, contrataron arquitectos, construyeron los planteles, reclutaron profesores, así también diseñaron los planes y programas, seleccionaron a los alumnos, los instruyeron y les dieron un título para que pudieran buscar trabajo.
Naturalmente, para que funcionen estas escuelas y universidades el Estado les asigna un subsidio y todo para que no se les cobre a los alumnos. Es llamado sistema de educación gratuita, “donde todo lo paga el gobierno”.
Los profesores, funcionarios y trabajadores universitarios tienen contratos de por vida, salvo algunos que son temporales.
Algunas observaciones en torno el sistema educativo del Estado de Hidalgo:
GASTAR O INVERTIR EN LA EDUCACIÓN
Hay una enorme confusión entre gasto e inversión educativa. El gasto en educación o en cualquier otro rubro implica un retorno cero de los recursos destinados. Es como subirse a la rueda de la fortuna donde se pagan $50.00 y no te regresan $100.00, ni siquiera $50.00 o menos, más bien te dan unas vueltas, sales todo mareado pero no te regresan ni un centavo, eso es gasto. Si tú quieres pensar que invertiste $50.00 en marearte y echar las tripas para fuera, es tu problema, llámale como quieras pero no digas que es “inversión” porque simplemente gastaste. Cuando el gobierno envía recursos a las escuelas o universidades, esos recursos nunca regresan, se esfuman y al año siguiente les dan otro tanto o más pues así como el gobierno no maneja esos recursos como inversión, tampoco lo hacen las escuelas y/o universidades. En cambio, la inversión implica manejar los recursos de tal manera que se obtenga la mayor tasa de retorno. Si inviertes cien, esperas que retornen doscientos de tal forma que la ganancia haya sido del cien por ciento. A las cosas hay que llamarle por su nombre y si es gasto, así se debe mencionar para no causar confusiones. Luego, se tiene que justificar por qué se gasta en educación en lugar de invertir.
El mal manejo de los conceptos “gasto” e “inversión” han causado enormes daños a la sociedad y es necesario corregir cuanto antes. Daños que implican destrucción de capital, exclusión de los pobres del sistema educativo, malformación de los profesionistas, corrupción en los centros de trabajo, pérdida de motivación en los docentes, centro de conflictos en las universidades, profesionistas desempleados, entre otros.
GASTAR EL ERARIO EN EDUCACIÓN ES UN ERROR
En realidad, nada justifica que los recursos para la educación se administren como gasto. Quizás en educación es donde menos se debe seguir esa forma de usar los recursos, pues es allí donde la gente debe enseñar y aprender que los recursos son escasos y que deben usarse de manera productiva. Es como si una isla toma la decisión de cortar todos sus árboles, sea para hacer sus casas o para cocinar sus alimentos. Por no pensar de manera productiva se quedarán sin casa y quizás sin alimento las siguientes generaciones. Lo mismo pasa con el uso de los dineros en la educación.
Los argumentos típicos, pero equivocados, para usar los recursos como gasto son los siguientes:
Los pobres no pueden pagar por su educación.
Lo que hoy se gasta, mañana retornará al Estado a manera de impuestos que pagarán los que estudiaron.
La educación de un pueblo es tan importante que no se deben escatimar los gastos que genere.
Vale la pena gastar en educación porque se construye un mundo mejor.
En realidad, ninguno de estos argumentos tiene validez.
Los pobres sí pueden pagar por su educación. Si bien puede ser cierto que hoy no pueden, pero sí podrán el día de mañana, por eso estudian, para que luego tengan la capacidad de hacer trabajos productivos y bien remunerados. Si la escuela pública acepta que los educandos serán incapaces de pagar sus gastos en educación, estaría aceptando que la educación que imparte es pobre, inútil y estéril. Este mismo argumento sería suficiente para desaparecer a la escuela pública.
Lo que hoy gasta la sociedad retornará al Estado a manera de impuestos. Si este razonamiento fuera cierto, entonces no existe razón de no cobrar la educación al profesionista una vez que empieza su vida productiva. No obstante, véase que el retorno es hacia el Estado, no hacia la sociedad. Nada garantiza que ese dinero en manos del Estado va a beneficiar a la sociedad. Quizás se distribuya en los partidos políticos o para hacer faraónicas obras de poca utilidad para la gente.
La educación del pueblo es tan importante que no se deben escatimar los gastos que genere. Pero la importancia de este tema reclama que los recursos se usen adecuadamente y eso no implica que se anden regalando o tirando sin pensar en los resultados. Más aún, esos recursos de ninguna manera se deben regalar a fin de garantizar que tengan un efecto positivo.
Vale la pena gastar en educación para construir un mundo mejor. Es una declaración muy peligrosa pues tiende al uso descuidado e irresponsable de los recursos. Por ejemplo, los viejos países comunistas gastaban en la creación de muchas escuelas y universidades y nada de eso les sirvió para construir un mundo mejor, incluso hoy han desaparecido. Cuba y Corea del Norte gastan sus recursos en educación y eso no les ha ayudado a construir un país próspero. Antes bien, si un país gasta lo mejor de sus recursos en construir escuelas y universidades, puede caer en la peor ruina.
DAÑOS COLATERALES DEL GASTO EDUCATIVO
El gobierno del Estado de Hidalgo usa la mayor parte de su presupuesto para el gasto educativo: Construye escuelas, contrata profesores, paga las quincenas de todos los trabajadores de la educación, asigna presupuesto para el mantenimiento de los planteles y otorga becas o estipendios a los alumnos. Todo esto significa un manejo inadecuado de los recursos para la educación.
ES MEJOR INVERTIR EN EDUCACIÓN
En realidad, el gobierno no debería construir ninguna escuela pues eso lo puede hacer el sector privado y, por tanto, no implicaría ningún gasto del gobierno. Si acaso, el gobierno podría otorgar créditos para aquellos particulares que quieran construir escuelas. Créditos que regresarían incrementados con la tasa de interés y que pueden servir para seguir prestándose a quien desee edificar escuelas y todo sin gastar un solo centavo del erario, es decir, de los recursos del pueblo. Hacerlo de esta manera, significa invertir en educación.
EL ESTADO NO DEBE CONTRATAR PROFESORES
El gobierno tampoco debe incluir en la nómina oficial a los docentes de las escuelas y universidades. La contratación de profesores lo debe hacer la iniciativa privada, es decir, los dueños de las escuelas y universidades. De esta forma evitaría el enorme gasto derivado del pago de miles de docentes. Una vez que el profesor tiene plaza asegurada de por vida por parte del gobierno, tiende a degenerarse pues a su labor se le ha quitado el factor riesgo. Además, se evitarían esos conflictos sindicales manifestados en huelgas, paros y marchas que estrangulan la educación de los niños y violan los derechos de los ciudadanos.
Cuando las escuelas son del gobierno se transforman en tierra de nadie y nadie las cuida, y cualquiera puede entrar a robar hasta las tasas de los sanitarios. Por eso se ven muchas escuelas primarias y secundarias decrépitas, con vidrios rotos, como si estuvieran abandonadas. Pero, si tienen dueño, éste las cuidará pues es su patrimonio. Bajo este concepto, el gobierno se evitaría el gasto en mantenimiento.
EL GOBIERNO NO DEBE REGALAR BECAS A LOS ESTUDIANTES
Si un particular regala su dinero, no está cometiendo ningún delito pues tiene el derecho de usar su propiedad como mejor disponga. Pero cuando un gobierno regala dinero, sabemos que ese dinero no viene de sus bolsillos, sino del erario, de los impuestos. Los impuestos son compulsivos, extraídos de manera forzosa, el ciudadano no los da de manera voluntaria. Los impuestos tienen la misma connotación de robo pues cuando alguien nos asalta en el camino no nos despoja de nuestras cosas contando con nuestra voluntad o beneplácito. Los impuestos implican operaciones forzosas, violentas, involuntarias. Por esto es muy delicado y requiere meditarse diez mil veces cada vez que se piense en establecer un impuesto a los ciudadanos.
Para “justificar” estas acciones se destina una parte al gasto social, es decir, se “regalan” servicios de salud, educación y becas para los mejores alumnos. ¿Es correcto el uso de los recursos de esta manera? Desde luego que no.
Es digno de observar que no todo lo que el gobierno extrae de la sociedad lo regresa a la gente. Esto es porque necesita recursos para pagar a los cobradores de impuestos, para los planeadores y para los distribuidores, de tal forma que para poder dar un peso de “regalo” a la gente, necesita extraer 4 pesos de otras gentes. Luego, el principal beneficiario del gasto social no es la sociedad, sino el gobierno mismo.
Si lo dicho anteriormente es cierto, concluimos que tampoco es correcto que el gobierno otorgue becas, es decir, dinero regalado a los alumnos pues por muy humanitario que se vea, hay que mirar la parte no humanitaria de quienes se extrae ese dinero de manera forzosa y que nunca se les consultó si de esa manera debían usarse esos recursos. Además, generalmente las becas se otorgan a los que obtienen mejores calificaciones y éstas están correlacionadas con la mejor situación económica del educando, de tal suerte que los más favorecidos económicamente son los que obtienen las becas. Si Marx hablara hoy, diría que las becas benefician a los más burgueses y empobrecen a los más pobres. Luego, es una injusticia. Pero aún cuando las becas las recibieran los pobres, es un sistema injusto pues implica descobijar a otros pobres que no son beneficiarios, en absoluto, del sistema educativo.
ELIMINAR LA EDUCACIÓN GRATUITA
Se dice que el gasto educativo es para mantener el sistema de educación gratuita.
El peor castigo que se le puede dar a un pueblo es imponerle un sistema de educación gratuita. Primero porque es un engaño, ya que nada hay gratuito en este mundo, “there is no free lunch” decía Milton Friedman. Lo que llamamos educación gratuita no es otra cosa que un sistema donde las escuelas están en poder del gobierno y se hace que unos paguen los gastos de otros, esto es lo que se llama escuela pública. El mismo Carlos Marx decía que el sistema de escuelas públicas es para que los pobres solventen los gastos de educación de los ricos. Es un sistema injusto.
El hecho de que el gobierno sea el “propietario” de las escuelas públicas, que el gobierno sea quien las mantiene con recursos del erario, que el Estado sea el que imponga los planes y programas de estudio y que sea el gobierno quien evalúa y sanciona si una escuela debe o no existir genera uno de los peores males en la educación que es el de transformarlo en un monopolio del estado.
EN EL ESTADO DE HIDALGO NO EXISTE LA EDUCACIÓN PRIVADA
De hecho, podemos afirmar que en el Estado de Hidalgo no existe la educación privada en sentido estricto. Si todas las escuelas privadas están obligadas a pedir permiso al gobierno para poder funcionar, si deben sujetarse a los planes y programas dictados por el Estado, si en la contratación de los profesores deben hacerlo de acuerdo a la reglamentación del Estado, si la titulación no se da si no está sancionada por el Estado, entonces el margen de acción de estas escuelas es mínimo.
El concepto de escuelas privadas implica que el gobierno no intervenga en absoluto. Quiere decir que la escuela privada es una entidad autónoma que toma sus propias decisiones sin pedir permiso al gobierno. Puede diseñar sus propios planes y programas, ampliarse, elegir el idioma en que va a impartir su enseñanza y otorgar diplomas, certificados, títulos y grados, sin necesidad de la sanción del Estado.
¿QUIÉN CONTROLA A LAS ESCUELAS PRIVADAS?
Se puede pensar que en un verdadero sistema de escuelas privadas, éstas viven en total desorden pues nadie las controla ni regula. Es un error verlas así. En realidad una escuela privada está sujeta a un mayor número de controles que una escuela pública. Dado que la escuela privada no vive del gobierno sino del mercado, es decir, de los consumidores o padres de familia; están sujetas a una evaluación constante de modo que tienen que dar un buen servicio si no quieren perder el favor del cliente. Esto no sucede en la escuela pública, donde la conducta de los docentes no es moderada por los clientes. El funcionario de la escuela pública sabe que el padre de familia tiene poder cero por lo que poco le importa su opinión. En cambio, la escuela privada tiembla cada vez que un padre de familia queda inconforme pues no sólo pierde un cliente, sino su prestigio y por tanto, a los amigos y conocidos del cliente.
EL GASTO EDUCATIVO IMPLICA DESTRUCCIÓN DE CAPITAL
El gasto educativo que aplica el gobierno, viene del erario, de los impuestos. Los impuestos se extraen de las empresas, de los empleados cautivos, de los consumidores y de la gente pobre.
Si el dinero se extrae de las empresas, es un dinero que bien pudo haber usado el empresario para ampliar su fábrica, contratar trabajadores, comprar materia prima y elaborar nuevos productos. Pero al despojar al empresario de ese dinero, se verán perjudicados los trabajadores y empresarios que iban a hacer la ampliación de la fábrica, los trabajadores que iban a ser contratados, los que iban a vender materia prima y los ciudadanos que iban a consumir los nuevos productos. Al pagar impuestos, el empresario no deja de comer lo mismo de siempre, así que no es el mayor perjudicado. En cuanto a los beneficiarios de los impuestos, en primer lugar están los funcionarios del gobierno y luego toda la burocracia que administra los impuestos. El “beneficiario” final es el que recibe el “regalo” pero que ahora se ve comprometido a votar por aquél que dadivosamente le dio una parte del botín. Mal sistema donde a los hombres los transforma en subordinados del gobierno, de los partidos políticos o de los funcionarios corruptos. EL MODELO EDUCATIVO QUE NECESITA EL ESTADO DE HIDALGO
El Estado de Hidalgo tiene todo para construir el mejor sistema educativo del país. Para ello primero necesita reconocer que el sistema educativo que tiene es de muy poca utilidad. Todo su sistema educativo necesita ser transformado, reformado y reconstruido.
A largo plazo, debe haber un sistema educativo totalmente privado, donde el gobierno no es poseedor de ninguna escuela, academia, instituto o universidad.
Pero debe ser un sistema donde todos los hidalguenses u otros ciudadanos tienen la oportunidad de estudiar sin que la limitación sea la falta de recursos económicos. ¿Es posible lograr este sueño? Por supuesto que sí.
PRIMERA ESTRATEGIA: Voucher system for education.
También se le llama “bono educativo” y es la propuesta de Milton Friedman, Premio Nobel de Economía 1976, desarrollada en el capítulo VI de su libro “Libertad de Elegir”. Hoy ya se aplica en varios países del orbe.
Introducir el bono educativo significa cambiar los flujos de financiamiento a las escuelas públicas. Hoy en día los dineros se envían directamente del gobierno a las escuelas y universidades. El plan es cortar ese flujo directo del dinero y en su lugar introducir una triangulación del subsidio. Por ejemplo, si la secundaria de Actopan funciona con un presupuesto anual de diez millones de pesos para darle educación a mil niños, quiere decir que cada niño está gastando diez mil pesos anuales. Esto significa que cada niño representa un gasto de $833.33 pesos cada mes. Bueno, la idea es que el niño o padre de familia, acuda a una sucursal bancaria donde recibirá un cheque o bono educativo que le servirá para pagar la colegiatura en la secundaria de Actopan. El cheque es intransferible, es decir, sólo sirve para pagar la colegiatura del niño y no se puede usar en la cantina ni en un centro comercial. Naturalmente, si el niño deja de asistir a la escuela, ésta dejará de recibir ese cheque. Si el niño o padre de familia observa que la escuela no se preocupa lo suficiente por la educación recibida, tiene la opción de cambiarse a otra donde crea que recibirá mejores servicios.
AUTONOMÍA ADMINISTRATIVA. Cuando la escuela recibe los cheques de los niños, los transforma en efectivo o los deposita en una cuenta de cheques para tenerlos a su completa disposición. Ese dinero servirá para formar los sueldos y salarios del personal docente y administrativo. Para determinar los sueldos, los profesores y administrativos tienen la libertad de reunirse y discutir la forma de distribución. De esas discusiones se determinará cuánto se usa para mantenimiento, crecimiento o renovación de mobiliario.
AUTONOMÍA ACADÉMICA. Significa darle libertad a cada escuela o universidad para que determine sus planes de funcionamiento y sus programas de estudio. Por ejemplo, si una escuela decide dictar todas sus clases en inglés porque así satisface los gustos de los padres de familia, debe tener la libertad para hacerlo. Otras escuelas tendrán inclinación por fortalecer la formación musical o en matemáticas. Todas las escuelas deben probarse y estar atentos a la respuesta del mercado, de los padres de familia. Si una escuela tiene una gran demanda porque los padres de familia quieren inscribir allí a sus hijos, se puede presumir que es una escuela buena, pues el mercado la está premiando o castigando. Si una escuela tiene baja demanda, seguramente es porque los profesores o administrativos no atienden bien a sus clientes. Esto la obliga a corregirse y mejorar o cerrar definitivamente. Y no pueden culpar al gobierno.
LO DEMÁS PUEDE SEGUIR IGUAL. Es decir, los profesores pueden seguir enviando sus cuotas al ISSSTE u otro organismo de salud, y lo mismo en relación al sindicato, pueden seguir cotizando.
PRESERVA LA EDUCACIÓN GRATUITA. Nótese que sigue siendo un sistema de educación gratuita, entendida como “el que estudia, no paga”. Cierto que paga una colegiatura, pero no es con dinero de su bolsillo, sino del que el gobierno le proporciona cada mes que acude al banco.
En realidad, el sistema de subsidio a la demanda se puede aplicar de la noche a la mañana. No necesita más que redirigir los dineros; esto es, en lugar de que los recursos vayan a las escuelas van directos a un banco.
Se puede garantizar que el primer resultado es la disminución de la deserción. Ahora todos los profesores estarán preocupados porque Juanito regrese todos los días a la escuela. Seguro lo visitarán a su domicilio para manifestar su preocupación por su salud, por su educación y seguramente… porque siga llevando el cheque mensual.
Como cada escuela quiere siempre más recursos, ahora sabrá que se obtienen sólo si llegan más niños, luego, harán promoción hasta casa por casa para lograr que los niños acudan a la escuela o bien tratará de ofrecer mejores servicios que la escuela vecina. Esto creará un sistema de competencia donde saldrán bien beneficiados los que mejor sepan responder a las necesidades, gustos y preferencias del consumidor. El resultado final es que los educandos salen mejor beneficiados.
No hay argumentos válidos para que los docentes o padres de familia se opongan a este nuevo esquema de financiamiento, pero si lo hubiera, en lugar de aplicarlo a todo el Estado de Hidalgo, se puede aplicar a un municipio, el más débil, pobre y olvidado. Pero si aún se dieran resistencias en todo un municipio, se puede aplicar en una sola escuela, la más recóndita y alejada de la civilización. De cualquier manera los resultados positivos se notarían en corto plazo. Convencidos de que el sistema de subsidio a la demanda es mejor que el subsidio a la oferta, se puede extender a todo un municipio, luego a todo el Estado y a todos los niveles. No debe demorarse más de dos años.
SEGUNDA ESTRATEGIA. BANCO DE LA EDUCACIÓN.
Consiste en invitar a la iniciativa privada para que forme el Banco de la educación. Si acaso la iniciativa privada no lo quisiera formar, lo podría hacer el mismo gobierno pero con una estricta reglamentación.
Este banco tendría las siguientes funciones:
Otorgar financiamiento a todos los alumnos inscritos a partir de la educación media superior para que dispongan de los recursos necesarios para pagar la colegiatura si decidieron estudiar en una universidad privada o si no alcanzaron bono educativo (gratis), o para cubrir todos sus gastos de manutención a fin de que puedan dedicarse de tiempo completo a sacar su carrera. Incluso, si un alumno decide estudiar en el extranjero puede contar con todos los recursos necesarios. Cuando el alumno termina, empieza a regresar los dineros con todo y los intereses. Con plazo hasta de 20 años para pagar su deuda. Los intereses no deben ser blandos, sino competitivos. De esta forma, no habrá nadie que tenga de pretexto que no estudia por falta de recursos. La virtud de esta idea es que resuelve un problema de injusticia ya que el alumno se hace cargo de sus gastos, no los paga hoy sino a futuro. En otras palabras, no le está transfiriendo la factura a terceros.
Otorgar financiamiento a las escuelas privadas que ya existen a fin de que crezcan y se diversifiquen. Así se incrementa la oferta educativa sin gastar un centavo del erario, pues todo regresa, incluso incrementado por la tasa de interés.
Otorgar financiamiento al profesor, a los profesores o a los particulares que deseen fundar escuelas y/o universidades.
Otorgar financiamiento a los alumnos que terminan la carrera y quieren fundar su propia empresa.
Obsérvese que esta propuesta implica usar los recursos como inversión y no bajo el esquema de fondo perdido.
TERCERA ESTRATEGIA. PRIVATIZAR LAS ESCUELAS PÚBLICAS.
Significa que el gobierno ya no debe sustentarse como propietario de escuelas o universidades pues eso sólo es coherente con esquemas de planificación central, es decir, para economías socialistas, comunistas, nazis o fascistas, pero nunca para economías de mercado, capitalistas o libres.
La mejor forma de privatizar las escuelas y universidades consiste en vendérselas a los propios profesores que en ellas laboran, es decir, transformarlos en accionistas. Los docentes podrían comprar las escuelas con sus liquidaciones como trabajadores del Estado. Si no alcanzaran a pagar con sus indemnizaciones, el Estado les podría dar crédito a 20 años. Pero es muy posible que podrían liquidar y aún les sobraría dinero para que tomen unas vacaciones placenteras.
La propuesta de que se vendan las escuelas a los profesores conlleva la idea de que cambien de status, es decir, que pasen de empleados, burócratas a empresarios. Con su nuevo status es posible que pudieran influir para que los alumnos empiecen a cambiar sus expectativas y que en lugar de estudiar para llegar a conseguir un empleo, piensen que estudian para desarrollar su capacidad emprendedora, su visión de empresario.
ESTRATEGIA CUATRO. ELIMINAR LOS SUBSIDIOS
Paulatinamente se deben eliminar los bonos educativos para lograr que: el que tiene dinero, pague su educación o la pague su familia; el que no tiene dinero, use el sistema de crédito. De esta manera, se irá resolviendo un gran problema de injusticia donde la educación ha estado apoyada en los hombros de los pobres, siendo que ellos no se benefician del sistema educativo y menos de las universidades.
De esta manera el Estado dejaría de estar presionado por el gasto educativo pues prácticamente desaparecería ese renglón. Esta sería la base para un cambio de política fiscal que incida en una reducción significativa de los impuestos.
ESTRATEGIA CINCO. APERTURA INTERNACIONAL
Abrir las puertas a las universidades extranjeras. Si fuera posible que el gobierno del Estado de Hidalgo consiguiera sucursales de universidades prestigiosas como: la Universidad Francisco Marroquín (la mejor en economía), Princeton, MIT, Harvard u otra establecieran sucursales en Hidalgo sería muy benéfico pues aumentaría la oferta educativa y la competencia con las instituciones nacionales. Todos nos beneficiaríamos de ello. Los profesores tenderían a percibir ingresos internacionales. Además, serviría para que México y particularmente el Estado de Hidalgo desarrollen su mercado internacional de la educación.
ESTRATEGIA SEIS. DOMINIO DEL INGLÉS
La ciencia se escribe en inglés. En el Estado de Hidalgo no se ha comprendido la importancia del idioma inglés y por eso salen los niños y los nuevos profesionistas sin dominar esa lengua. Eso coloca a los profesionistas al margen de la ciencia y de los negocios internacionales ya que también éstos se hacen en inglés. Por tanto, se puede fomentar el surgimiento de escuelas y universidades donde sólo se hable inglés, en las escuelas públicas el 80% de las clases se deben dar en inglés. La idea es que para el año 2030 todos los hidalguenses hablen perfectamente español e inglés.
ESTRATEGIA SIETE. CAMBIO DE FILOSOFÍA
En el fondo, la idea es cambiar la vieja filosofía de las escuelas, que educan y adoctrinan a los niños y jóvenes para ser profesionales con espíritu de subordinación, empleados que sólo saben obedecer las órdenes del Estado o de un patrón. No es delito ser empleado pero lo que el país necesita urgentemente son profesionales emprendedores, empresarios dispuestos a asumir riesgos, que saben detectar las oportunidades de negocios mirando los gustos, preferencias y caprichos de la gente.
CONCLUSIÓN
Desde la entrada por la autopista de Pachuca se percibe un gran anhelo de crecimiento, desarrollo y modernización del Estado de Hidalgo. Pero ese crecimiento puede ser frenado anulado y apagado si no se logra tener un sistema educativo moderno que esté en armonía con este pujante desarrollo. En realidad modernizar el sistema educativo no implica mayores gastos, al contrario, con las reformas estructurales aquí propuestas el gobierno se evitaría de un gasto inútil y perjudicial.
Para hacer estas reformas sólo se necesita una gran voluntad política de los hombres que toman decisiones. Si se deciden, poniendo la vista en el futuro, los hidalguenses y todos los mexicanos saldremos beneficiados.
Acerca del Autor Es originario del Estado de México.
Estudios: Licenciatura en Física y Matemáticas. ESFM-IPN, Maestría en Matemáticas aplicadas a la Economía. CIDE, Doctorado en Ciencias Económicas. UAM, Doctorado en Economía. ESE-IPN, PhD in Economics. Tulane University. New Orleans.USA, Doctor en Ciencias en Economía Agrícola. Universidad Autónoma Chapingo.
Es profesor investigador en la UNIVERSIDAD AUTÓNOMA METROPOLITANA y
Director del Seminario de la Escuela Austriaca de Economía. También es Presidente de la UNIÓN NACIONAL DE CONTRIBUYENTES ATLAS A.C.