A partir del año 2000 las universidades “patito” han proliferado en forma descontrolada. En base a investigaciones especializadas se estima que en los últimos 6 años el número de organizaciones que ofrecen educación superior se ha incrementado en un 50 por ciento, la mayoría de las cuales no garantizan un nivel adecuado en sus programas de estudio.
A
partir del año 2000 las universidades “patito” han proliferado en forma
descontrolada. En base a investigaciones especializadas se estima que en los
últimos 6 años el número de organizaciones que ofrecen educación superior se ha
incrementado en un 50 por ciento, la mayoría de las cuales no garantizan un
nivel adecuado en sus programas de estudio.
Lo
anterior tiene resultados nefastos para miles de jóvenes y padres de familia
que son engañados por centros de educación que ofrecen títulos profesionales en
tiempos mínimos, requisitos sumamente flexibles y pagos nada módicos. Para las
víctimas de estas falsas universidades el desencanto y la triste realidad no se
hacen esperar al no encontrar los así graduados ocupación digna en el mercado
de trabajo, de por sí escaso y cada vez más exigente y mal pagado.
Hoy
en día, lo que todo aspirante a cursar estudios de nivel universitario debe
saber es que existen a nivel nacional organismos acreditadores
de los programas de estudios que imparten las distintas universidades.
La
acreditación es un proceso de evaluación de los planes y programas de estudio
que tiene como objetivo medir su calidad y pertinencia y consiste en verificar
que la educación que ofrece un centro de estudios cumple con un conjunto de
normas en materia de contenidos, instalaciones, tecnología educativa,
preparación de docentes y técnicas de enseñanza y evaluación, entre otros
aspectos.
La importancia y el valor que
tiene una acreditación de calidad para cualquier universidad pública o privada,
es posible apreciarla a partir del dato de que de 2 mil instituciones de
educación superior que hay en México, sólo 130 han logrado el reconocimiento
por parte de
El Centro de Estudios
Superiores del Estado de Sonora (CESUES), inició el año 2007 con cuatro
certificados expedidos por los mencionados organismos acreditadores,
mismos que respaldan la calidad y pertinencia de los programas educativos de comercio
internacional y administración de empresas turísticas de
De esta manera de las más de
20 instituciones de educación superior existentes en el estado de Sonora, el
CESUES y
Como profesor investigador del
Centro de Estudios Superiores del Estado de Sonora el autor de esta columna desea
externar su satisfacción de pertenecer a una organización que se ha venido
esforzando por colocarse en el nivel de la excelencia. Pero no se piense que
este orgullo del que participa toda la comunidad universitaria CESUES es motivo
de deslumbramiento y presunción, sino al contrario es el acicate para el
esfuerzo permanente, la exigencia constante por la calidad y la búsqueda
incansable del conocimiento innovador.
En el foco de este entusiasmo
educativo se encuentra nuestra materia prima, el alumno, y en el extremo final
del proceso se encuentra un producto singular: profesionistas competitivos y
comprometidos con nuestra realidad.
EntrarTanta sociedad como sea posible, tanto gobierno como sea necesario.