No podemos echarle la culpa a un modelo de economía de mercado para atribuirle el mediocre crecimiento económico y la persistencia de altos índices de pobreza e inequidad cuando en realdad estamos todavía muy lejos de ser una auténtica e integral economía de mercado.
Ya podría perder por 15 o 20 millones, o de plano no ser candidato: le seguirían haciendo fraude, y siempre tendría a quién culpar de cuánto daño le hacen y así nutrir su resentimiento. No, no tiene límites.
Los priistas tienen los recursos para dejar en claro que no están dispuestos a tolerar la intentona golpista. Hay que diseñar una estrategia inteligente para neutralizar las pérfidas intenciones de los perredistas enemigos de la democracia.
La absoluta máxima de Macaco, de la que se derivan las demás, dice: El respeto ajeno a mi derecho, es la paz. Y como mi derecho propio es absoluto, el derecho ajeno no tiene importancia (tampoco la paz).
Lo peor es que vuelvan a surgir estudiantes manipulados por sus profesores socialistas. Eso no es ningún “despertar” de la juventud. Eso es regresar al oscurantismo sesentero.