El gobierno debe permitir las importaciones. Todas las importaciones. Todas las que los consumidores nacionales estén dispuestos a comprar. Todas. Sin excepción.
El limitar las opciones de solución de un individuo a su provincia o país, para obtener cierta autosuficiencia, o encarecerlas mediante medidas antidumping, es una monumental y empobrecedora estupidez.