La diferencia en las comisiones que cobran las Afores me lleva a la siguiente pregunta: ¿qué tanta competencia hay en el mercado?, porque no basta que haya muchos participantes, ni que los consumidores tengan la posibilidad de elegir, haciendo falta algo más.
Una
y otra vez las autoridades monetarias y financieras del país declaran que, en
beneficio de los consumidores, las comisiones que cobran las Administradoras de
Fondos para el Retiro, las Afores, deben bajar, lo cual se logra, de la manera
más eficiente posible, por medio de la competencia entre ellas, competencia
que, dirán algunos, ya es una realidad, dada la cantidad de administradoras que
operan en el mercado – veintidós -, y dada la posibilidad de que los usuarios
se cambien de Afore. Sin embargo, la diferencia en las comisiones que cobran
las Afores me lleva a la siguiente pregunta: ¿qué tanta competencia hay en el
mercado?, porque no basta que haya muchos participantes, ni que los
consumidores tengan la posibilidad de elegir, haciendo falta algo más. Veámoslo.
Según
información proporcionada por
Pero
todavía más interesante, ¿cómo es posible que, en un mercado competido,
subsista esa diferencia de precios? Los economistas aceptamos que, donde hay
competencia, los precios (en este caso las comisiones) tienden a igualarse,
razón por la cual, en mercados donde hay competencia, una diferencia del 138
por ciento, entre el precio más alto y el más bajo, resulta inexplicable.
Entonces, ¿cómo explicarla en el mercado de las Afores? ¿No será que la
competencia deja mucho que desear, pese a que hay veintidós participantes, y a
que los consumidores tienen la posibilidad de cambiar de Afore? Llegados a este
punto la pregunta es, ¿se cambian?
La
competencia supone, uno, muchos participantes por el lado de la oferta; dos, la
posibilidad de que los consumidores elijan entre ellos y, tres, el que
realmente elijan y actúen en consecuencia. Porque un
cosa es la posibilidad de elegir y otra la elección. En el caso de las Afores,
¿cuántos ahorradores están informados, teniendo por lo tanto la posibilidad de
comparar y, por ello, el incentivo para cambiar de Afore? ¿Cuántos? Para que
haya competencia no basta con la participación de muchos oferentes (no
confundamos participar con competir), ni con la posibilidad de que los consumidores
cambien de uno a otro (no confundamos la posibilidad con la acción que la misma
hace posible).
Teniendo en cuenta la
anterior, ¿qué tanta competencia hay entre las veintidós Afores que operan en
el mercado? Si acepto lo que la mayoría de los economistas acepta desde que en
el siglo XVIII Ricardo Cantillon y Adam Smith lo señalaron - que allí donde hay
competencia los precios tienden a igualarse -, y partiendo del hecho de que la
comisión que cobra
Lo anterior, ¿es una mera
especulación, o responde a la realidad? Usted, lector, ¿está informado, ha
comparado y actuado en consecuencia?
EntrarTanta sociedad como sea posible, tanto gobierno como sea necesario.