Le sugiero al Presidente Calderón lo siguiente:

• Que no ceda al chantaje del Sindicato Mexicano de Electricistas de la Compañía de Luz y Fuerza del Centro. El SME es una verdadera mafia (que apoya a políticos como López y Chávez) que sólo ha engordado la plantilla laboral de la compañía de luz y que está coludido con el robo de luz. El SME es un sindicato que ha llenado de huecos financieros a la empresa y de toda clase de prestaciones de la que no gozan el resto de los mexicanos. La estrategia del SME es una confrontación contra el gobierno (se nota por sus ridículas pericones), por lo que si hay huelga (para cuando lea este artículo amigo lector, ya lo sabrá), es necesario requisarla.

• Que liquide cuanto antes a esta empresa (aunque no haya huelga) y deje que entre la CFE a cubrir el territorio en que hoy opera la Compañía de Luz, para luego emprender una seria reforma energética que sólo deje a CFE operando las líneas de transmisión, pues la generación y comercialización de electricidad son campos que se prestan a que haya competencia, por tanto es mejor que sean operados por empresas privadas.

• Que le entre en serio a la reforma petrolera y cuanto antes anuncie la estrategia a seguir. En la sociedad ya comenzó el debate y urge una posición del gobierno. Entendemos que hay que dejar espacio a la negociación discreta, pero el caso Mouriño y las mentiras de López pretenden crear cortinas de humo, para que no sólo no haya debate sobre la reforma energética, sino tampoco reforma alguna.

• Que ya le pare a su estrategia keynesiana de otorgar subsidios sin ton ni son y decretar controles de precios. No es con mayor gasto público (y menos con precios controlados) como se blinda una economía.

• Que no apueste todo por los bancos estatales de desarrollo. A estos se les ha rescatado de la quiebra con recursos de los contribuyentes varias veces.

• Que no ceda al chantaje de los padres de los mexicanos muertos en el ataque de Colombia a las FARC. He oído algunas exigencias ridículas de algunos de los padres de los muertos. Insisten en que el gobierno mexicano exprese una seria protesta contra Colombia por haber asesinado a compatriotas. A ver, eso es cinismo de algunos padres. Sus hijos se encontraban ahí y no era en un tour. Eran abiertos simpatizantes de las FARC. Sus padres conocían perfectamente el terreno en el que se movían sus hijos. Me atrevería a decir (por el tono que le escuché a uno de los padres de los muertos) que incluso los mismos padres habrían fomentado la “conducta revolucionaria” de sus jóvenes. Como liberal detesto la violencia, pero no hay que ser bobalicón. La guerrilla le declaró la guerra al Estado colombiano desde hace varias décadas, por lo que los ataques de ambas partes están a la orden del día. No hace falta un conflicto entre Ecuador y Colombia para que haya acciones militares. Los jóvenes mexicanos se metieron en esa guerra y debían haber estado conscientes de sus actos.

• Que abandone su mediocre política exterior. El Presidente debería de estar del lado de regímenes como el colombiano y expresar abiertamente su repudio a las dictaduras y a gobiernos como el ecuatoriano y el venezolano que hoy sabemos claramente están conspirando para derrocar a democracias como la colombiana. México podría ser el siguiente blanco de Chávez y Correa.

• Que emprenda una seria reforma en la UNAM para que se cobren colegiaturas y no se toleren a los grupos radicales incrustados en algunas facultades de esa institución.

• Que recomponga seriamente el sistema de inteligencia del gobierno, que hasta ahora ha sido rebasado por los terroristas.

Con estas sugerencias no pretendo convertirme ser en un súperasesor del gobierno (qué flojera); sólo expreso el sentir de millones de ciudadanos mexicanos que el Presidente está ignorando. Ojalá se ponga las pilas el Presidente.