Las condiciones generales de una economía pueden medirse en función de su dinamismo y estabilidad. Lo mejor es mayor dinamismo con mayor estabilidad. Lo peor menor dinamismo con menor estabilidad. Entre estos dos extremos hay dos posibilidades: menor dinamismo con igual estabilidad e igual dinamismo con menor estabilidad.

El dinamismo de la economía está relacionado con su crecimiento, que se mide por el comportamiento de la producción de bienes y servicios para el consumo final, el Producto Interno Bruto.

La estabilidad está relacionada con el poder adquisitivo del dinero, que se mide por el comportamiento del Índice Nacional de Precios al Consumidor, a partir del cual se calcula la inflación.

Lo mejor para la economía es mayor dinamismo, mayor crecimiento del PIB, con mayor estabilidad, menor inflación (o deflación). Lo peor es menor dinamismo, menor crecimiento (o decrecimiento) del PIB, con menor estabilidad, mayor inflación. ¿Qué nos espera este año?

Antes de responder recordemos qué pasó, en materia de dinamismo y estabilidad, en las dos crisis más recientes, la de 1995 (Efecto Tequila) y la de 2009 (Gran Recesión).

En 1994 la economía creció 4.9 por ciento y la inflación fue 7.1 por ciento. En 1995, Efecto Tequila de por medio, la economía decreció 6.3 por ciento y la inflación fue 51.8 por ciento. En 1995 tuvimos menor dinamismo y menor estabilidad.

En 2008 la economía creció 1.1 por ciento y la inflación fue 6.5 por ciento. En 2009, Gran Recesión de por medio, la economía decreció 5.3 por ciento y la inflación fue 3.6 por ciento. En 2009 tuvimos menor dinamismo y mayor estabilidad.

Salimos mejor librados de la Gran Recesión que del Efecto Tequila. ¿Cómo terminaremos este año?

Parte de la respuesta la encontramos en los resultados de la Encuesta sobre las Expectativas de los Especialistas en Economía del Sector Privado, que levanta el Banco de México, correspondiente a marzo. En materia de crecimiento para 2020, la media de las 35 respuestas recibidas lo proyectan de menos 3.99 por ciento (menos 11.25 la proyección más pesimista, menos 1.61 la menos). En lo referente a la inflación para este año, la media de las 35 respuestas la proyectan de 3.75 por ciento (2.40 la más optimista, 6.16 la menos).

Dando por buenos los resultados de la encuesta de marzo, que cambiarán en la de abril, sobre todo en materia de crecimiento, tenemos lo siguiente. Crecimiento: 2019, menos 0.1 por ciento; 2020, menos 3.99. Inflación: 2019, 2.83 por ciento; 2020, 3.75. Si bien se espera un repunte en la inflación, de mantenerse dentro de los márgenes previstos, será un problema menor. El mayor problema será el decrecimiento de la economía, que será mayor al 3.99 por ciento previsto en la última encuesta del Banco de México.