¿Cuánto gana un empleado de este sistema? ¿Cómo están las finanzas? ¿Se podría mejorar este sistema tanto en servicio como financieramente?
El Sistema de Transporte Colectivo Metropolitano
(METRO) es un hecho que dista mucho de ser un medio de transporte efectivo o
moderno que nos lleve de un lugar a otro con comodidad, aunque eso sí, su
precio es bajo.
Hace unas semanas Jorge Zepeda Patterson en su columna dominical escribía que la diferencia entre nuestros vecinos del norte y la gente de nuestro lado es que aquí las personas sonríen y no van con prisa por las calles correteando el dinero. Pues si no corretean el dinero entonces quién sabe qué persiguen con tanta prisa, ¿las personas sonríen?, ¿hace cuánto que el señor Zepeda no se sube al METRO?
El METRO es un medio de transporte en el que se platica poco y se sonríe
menos, a toda hora hay prisa, a toda hora hay malas caras, malos modales, es un
juego terrible en “horas pico”, donde es simple -“o ellos o yo”- si lo que se
quiere es abordar o bajar de un vagón en estaciones clave como Zócalo,
Universidad, Centro Médico, Cuatro Caminos, etc. Hay que olvidar toda civilidad
y atacar y empujar si se quiere lograr el cometido. Hay quién dice “te
acostumbras”, ah pues qué bien que lo logren, qué bien que se acostumbren a ser
unas bestias que no reconocen ni sexo ni edad y agarran parejo contra todo,
pero creo que no es lo mío. Puedo, por supuesto, elegir no subirme y listo,
asunto arreglado, pero ¿por qué no puedo elegir otro proveedor del servicio?
Sí, el METRO es un lugar inhóspito, no soy Carlos Monsivaís
para escribir: “el METRO es un collage
donde se funden imágenes de todos los Méxicos que
existen en una forma multicolor y multicultural que hace de esto un mosaico
surrealista que nos muestra en todo su esplendor nuestra idiosincrasia...”,
o algo por el estilo no, el METRO es un medio de transporte sumamente necesario
que ha quedado rebasado.
¿En cuántas de las 175 estaciones ha notado que no sirven las escaleras
eléctricas?, ¿cuántas tienen rampas para discapacitados?, ¿cuántas tienen
policías que realmente vigilen y guarden el orden?
Según datos de la página del METRO (www.metro.df.gob.mx),
el parque vehicular asciende a 348 trenes cuya fabricación varía desde los años
1968 (casi 40 años con los mismos trenes) para las líneas 1, 9 y B, hasta 2005
y 2006 que utilizamos los privilegiados usuarios de la línea 2 (¿por qué en
esta línea se utilizan los más modernos?, ¿será acaso porque es la más
“vistosa”?).
Eso sí, según la misma página la capacidad de un tren de éstos es de 349
personas sentadas y 1,479 de pie, ¡ja!, un viaje de Tasqueña a Zócalo o de Cuatro Caminos a Zócalo, o ¿le gusta
de Pantitlán a Chabacano?, a las 8 de la mañana y se
demuestra con facilidad que las capacidades son excedidas.
1,416,995,974 usuarios en el año 2006 nos
reporta el sitio, ¡más de mil millones de usuarios!, en un año, más de 176 mil
kilómetros de vías y más de 39 millones de kilómetros recorridos y… trabajan
con pérdidas.
No es inusual por eso que cuando uno va “relativamente” cómodo y con
pocas personas a su alrededor, las puertas tarden hasta dos minutos en cerrarse
en cada estación, claro, no es negocio transportar a pocos individuos (y con
sus números ni a muchos), hasta que el conglomerado que formamos, “la perrada
que ahí vamos ya no podemos respirar” es cuando las puertas duran sólo unos
segundos abiertas antes de seguir el viaje, ¿por qué esa discriminación?
¿Cuánto gana un empleado de este sistema?, ah, pues encontramos en el
mismo sitio la información, la gentil taquillera que de forma sorprendente
puede hablar por teléfono, comer una torta y despacharnos se embolsa $5,986.12
al mes, los hombres de la limpieza de los trenes ganan la suma de $5,495.46,
¿cuánto se lleva un conductor?, ¿éste ser que ni sufre ni se acongoja porque
sólo sigue los semáforos y no va a encontrar tráfico en su ruta?, $6,630.99,
¿un jefe de estación?, que quién sabe dónde están, $6,258.13, ¿un auxiliar de
seguridad que quién sabe para qué sirve?, $6,297.17. Sueldos tomados del
tabulador de sueldos, personal operativo de base vigente a partir del 1° de enero
de 2006 (http://www.metro.df.gob.mx/imagenes/transparencia/2007/tabsbase0207.pdf).
Pues no sé usted pero no me dan muchas ganas de trabajar ahí, hasta justifico
un poco las malas caras, pero...
¿Y si hablamos de los
burócratas iluminados?, esos que están en los edificios y nunca donde está la
acción, la cosa cambia: Un jefe de unidad (¿?) gana $17,597.29 al mes, ya
mejoró ¿no?, un subdirector, $23,155.43, un coordinador, de $29,615.71 hasta
$37,413.30, un subgerente de $38,412.74 a $40,677.65, un gerente, $49,186.66,
un director, $53,228.01, un subdirector general 70,284.39 y finalmente el
director general se lleva a su casa al mes la cantidad de $73,261.30, así ya me
apunto. Todos estos sueldos son tomados del tabulador de sueldos
para servidores públicos superiores, mandos medios, líderes coordinadores y
enlace vigente a partir del 1° de septiembre de 2006 (http://www.metro.df.gob.mx/imagenes/transparencia/2007/tabsmandmedios0207.pdf).
¿Cómo están las finanzas?, mal, muy mal, los datos
disponibles son del año 2005. Sólo la pérdida de operación fue de
$3,509,989,666.97. El déficit de ingresos sobre
egresos del período fue de $4,757,179,679.63. Las
aportaciones del Gobierno del Distrito Federal fueron para ese período del
orden de los $5,603,832,428.64 y los resultados de
ejercicios anteriores acumulan en pérdida $25,056,925,062.23.
Información en la dirección http://www.metro.df.gob.mx/transparencia/fr5_estsitfinanciera.html.
A todas luces no es negocio.
¿Se podría mejorar este sistema tanto en servicio como
financieramente?, sin duda, pero no va a suceder mientras el gobierno quiera
seguir como único prestador de este servicio, ¿la industria privada lo haría
mejor en cuánto a estructura de costos y servicio?, sí, pero no lo va a hacer
mientras el Gobierno sea su competencia, ¿cómo competir contra aportaciones de
más de 5 mil millones de pesos para mantener el precio del boleto en 2 pesos?
El mismo Gobierno podría mejorar la situación de este
medio de transporte pero tampoco sucederá, es cierto que el bajo costo
beneficia a los más pobres, pero no todos los usuarios del METRO son los que
menos tienen, hay muchos que pueden y seguramente pagarían más (5 ó 7 pesos)
por boleto con tal de que estuviera más que asegurada la vigilancia eficiente,
trenes modernos, la limpieza, trenes cada determinado tiempo no importando
cuántos individuos haya en los vagones, buen trato de las taquilleras, acceso a
discapacitados, aire acondicionado, etc.
Si algo cuesta debe pagarse por ello, el subsidio que
mantiene el precio del boleto en 2 pesos ha hecho que el METRO trabaje en
condiciones muchas veces deplorables, si el precio va a subir pero las
condiciones cambian, adelante. Si no se deja entrar a administrar a los
privados entonces que el Gobierno mejore su servicio.
Me atacarán de capitalista salvaje por pedir que el
precio del boleto aumente, pues muchos pobres sufrirán con la medida, pero...
¿no hay forma de proteger a los que más necesitan del servicio y menos tienen?,
por supuesto y se podría (¿debería?) hacer también.
Sí, me atacarán de muchas cosas pero yo pregunto:
¿quién está peor?, ¿yo, que pido un precio más alto de ser necesario pero que
se respete a los seres que viajan en este sistema de transporte?, ¿o todos los
que su cara se ilumina de ira cuándo me escuchan, pero que condenan a todas
estas personas pobres y no tan pobres a ser tratadas como animales con tal de
que no paguen ni un peso más y se erigen como “defensores del pueblo” y qué
sólo son flojos para encontrar soluciones?
Como sea, el Sistema de
Transporte Colectivo Metropolitano necesita cambios ¡ya!
EntrarTanta sociedad como sea posible, tanto gobierno como sea necesario.